En el mundo del e-commerce, adoptar una cultura orientada a datos no es solo una opción, sino una necesidad para mantenerse competitivo.

Esta cultura se centra en la toma de decisiones basada en información objetiva, empoderando con datos tus suposiciones e instintos. Pero, si has probado en implementarla, seguro que te has encontrado con problemas.

En este artículo, exploraremos los cinco pasos fundamentales que permiten establecer una cultura data-driven en tu negocio.

Cada paso está diseñado para ayudarte a maximizar el uso de los datos y asegurar que cada decisión esté respaldada por información sólida, adaptándose así a las particularidades de tu e-commerce y llevándolo al siguiente nivel.

1. Centraliza tus KPIs

Una de las primeras y más importantes acciones que debe implementar cualquier negocio es la centralización de sus KPIs (indicadores clave de rendimiento). ¿Por qué es esencial? Tener un solo lugar donde se monitoreen tus métricas clave no solo facilita el acceso a la información, sino que también permite una evaluación más coherente y estratégica del rendimiento del negocio. Si cada miembro del equipo consulta los datos en un sitio distinto, estáis perdiendo el tiempo.

Es importante destacar que cada negocio cuenta con sus particularidades, por lo que es fundamental adoptar los KPIs a las necesidades específicas de tu negocio. Si tienes un e-commerce, es fundamental que midas:

• Facturación.

• Margen operativo

• Lifetime value.

• Coste de Adquisición de cliente

A partir de aquí cada métrica la puedes desgranar en más y cada negocio tiene sus particularidades.

En lugar de perderte entre múltiples herramientas, como Shopify Analytics, Google Ads o Facebook Ads, puedes optar por soluciones integradas similares a nuestra sección de analítica, Kresco Insights, que reúnen toda la información en un solo lugar

Si utilizas las plataformas de ads, cuidado con el ROAS (Return on Advertising Spend); no te fíes de los ROAS individuales que dicen las plataformas y calcula un ROAS blended entre todas, considera un modelo de atribución simple para ayudarte.

Además, nunca subestimes la importancia de los márgenes. A menudo, estos se descuidan, pero son fundamentales para la salud financiera de tu e-commerce. Calcula el costo total de cada producto, incluyendo gastos de envío, fabricación, transporte, devoluciones y tarifas de pago. Tener una visión clara de todos estos aspectos te permitirá tomar decisiones más informadas y, en última instancia, guiará a tu negocio hacia el éxito en un entorno cada vez más competitivo.

2. Define el Ownership

Una vez tienes las métricas necesitas owners: Uno de los elementos fundamentales en la construcción de una cultura data-driven en el e-commerce es la clara definición del ownership de cada KPI (Indicador Clave de Rendimiento). Asignar un responsable a cada metrica asegura que cada métrica tenga un “dueño” claro, lo que a su vez fomenta el compromiso en el seguimiento y mejora de los resultados.

Es vital tener en cuenta que no hay problema si una persona es responsable de más de un KPI, pero es un grave error tener múltiples responsables para un mismo indicador. Esta situación típicamente resulta en la dilución de la responsabilidad y, con frecuencia, deriva en la sensación de que la métrica es, en realidad, de nadie.

Si te enfrentas a la necesidad de tener más de una persona a cargo de un KPI, te recomiendo dividir la métrica en diferentes componentes. Por ejemplo, el Coste de adquisición por cliente se puede dividir en Coste por sesión y conversión rate; y asignar un responsable de adquisición y uno de conversión.

Seguramente trabajes con agencias, no te preocupes en asignarles el ownership de una KPI, pero la transparencia es clave en esta relación; deben saber cómo encontrar tu métrica y saber que les haces responsable de la misma o ya no tendrás gente mirando métricas distintas y perderás la magia del punto 1.

El owner de un KPI debe no solo responsabilizarse de que dicha métrica crezca, sino también entender los factores detrás de su comportamiento. Una disminución en un indicador no debe ser vista necesariamente como un fracaso, siempre y cuando se pueda explicar su causa. Este entendimiento profundo es esencial para poder reaccionar y adaptarse con estrategias adecuadas, convirtiendo desafíos en oportunidades de mejora. Con el enfoque correcto en la definición de la ownership, establecerás las bases para una gestión eficaz y consciente de tu equipo, lo que permitirá un crecimiento sostenible en el tiempo.

3: La puesta en común

Crear reuniones regulares donde los responsables de cada KPI puedan presentar sus resultados y reflexionar sobre su desempeño es fundamental. No se trata solo de informar, sino de fomentar un verdadero sentido de propiedad sobre las métricas por parte de los dueños. Si no existe un espacio donde estos responsables se vean obligados a explicar el motivo de las fluctuaciones en sus métricas, es probable que no asuman la responsabilidad real de estos resultados.

Un moderador eficaz es esencial en este tipo de reuniones. Este individuo debe ser capaz de hacer las preguntas adecuadas que fomenten una discusión profunda sobre las métricas y lo que las influye. Repito, es importante que se establezca claramente que ser el propietario de un KPI no significa que uno sea responsable exclusivamente de su incremento; los descensos también tienen que entenderse y analizarse de manera constructiva.

El papel del moderador es crítico no solo para gestionar la reunión, sino para crear un ambiente donde los dueños de las métricas se sientan cómodos al compartir tanto sus éxitos como sus retos. Un enfoque en la comprensión y el análisis detrás de las métricas permite que este proceso evolucione hacia una cultura de aprendizaje y mejora continua, donde cada miembro del equipo se sienta empoderado para asumir la responsabilidad.

4. Empodera a los dueños con exploración de datos

Los responsables de las métricas se encontrarán con un problema: comprender los "porqués" detrás de cada métrica no siempre es sencillo. Es imposible que un responsable de una métrica la entienda si no la puede explorar. A menudo, se requiere pasar horas sumido en dashboards y datos crudos.

Para optimizar este proceso, es vital contar con dashboards explorativos que ofrezcan un acceso visualmente intuitivo a los datos, facilitando así la identificación de patrones y tendencias.

En nuestra práctica, utilizamos soluciones de analítica que integran toda la información necesaria en un único lugar, eliminando la necesidad de estar cambiando de una herramienta a otra y, en su lugar, permitiendo que los dueños de cada KPI se concentren en el análisis en sí. Al proporcionar estas herramientas, no solo se les da el poder de comprender mejor sus métricas, sino que también se fomenta una cultura data-driven donde el análisis se convierte en parte integral de la toma de decisiones.

Paso 5: Valida tus intuiciones con datos

¿Y cómo impactar en ellas? Cuando entiendas por qué las métricas suben y bajan empezarás a tener ideas de cómo impactar.

Es recomendable que todas las ideas, sin importar su tamaño, se recojan en un único espacio accesible para todo el equipo. De esta forma, cada miembro podrá contribuir al proceso creativo, garantizando que ningún concepto valioso quede en el olvido. Una vez que las ideas están en su lugar, es vital priorizarlas. En nuestra experiencia, utilizamos el modelo ICE, que evalúa el Impacto, la Confianza y el Esfuerzo, para enfocar nuestros recursos en aquellas iniciativas con alta probabilidad de éxito y menos carga.

Cuando finalmente implementes tus ideas, no olvides medir su impacto. Si es posible, realiza A/B tests, puede ser una excelente manera de verificar si los cambios introducidos generan resultados positivos. Sin embargo, si no puedes, la clave está en monitorear de cerca tus métricas para detectar cualquier variación. En última instancia, este enfoque no solo valida tus intuiciones, sino que también fomenta una cultura de aprendizaje continuo, donde cada decisión se convierte en una oportunidad para crecer y adaptarse en el competitivo panorama del e-commerce.

Conclusión: La transformación hacia una cultura data-driven

En el vertiginoso mundo del e-commerce, adoptar una cultura orientada a datos no es solo una ventaja competitiva, sino una necesidad fundamental. A través de los cinco pasos esenciales que hemos explorado, desde la centralización de KPIs hasta la validación de nuestras intuiciones mediante datos, queda claro que cada uno de estos elementos es imprescindible para construir una organización sólida y eficiente. Promover la responsabilidad en el manejo de métricas, empoderar a los líderes con herramientas adecuadas, y crear un ambiente donde la rendición de cuentas y el análisis continuo sean la norma, son acciones que permitirán a los equipos no solo entender el rendimiento de su negocio, sino también adaptarse y crecer con él. En definitiva, al fomentar una mentalidad orientada a datos en cada miembro del equipo, estamos sembrando las semillas para un crecimiento sostenible y una toma de decisiones más informada, abriendo la puerta a un futuro donde los datos guían cada paso del camino empresarial.